La música y la danza vinculan al hombre con sus raíces. Por esta razón, el gobierno autónomo de Asturias cuenta con una política de apoyo y capacitación para la enseñanza de su folclore en los centros asturianos de todo el mundo.
Como parte de esa iniciativa, llegó la semana pasada a Necochea el etnógrafo Fernando de la Puente, quien dio un curso intensivo sobre danzas en el Centro Asturiano local.
La entidad cuenta con un grupo de danza que coordina Liliana Pinchinatti, una danzarina que realizó cursos de especialización en Asturias y que despertó el interés de sus profesores.
A raíz de ello, el Centro solicitó al gobierno regional asturiano el envío de un especialista para continuar con la labor de difusión de las danzas folclóricas en nuestra ciudad.
Fue así como se decidió enviar a De la Puente, que de esta manera llega por segunda vez a nuestro país. "La música es una embajadora de Asturias", dijo el especialista, que aprovechó la ocasión para brindar una charla sobre el origen del himno regional "Asturias, Patria Querida".
Este joven investigador, es profesor de la Escuela de Asturianía del Consejo de Comunidades Asturianas, entidad que promueve el estudio del folclore y las tradiciones de esta región española en todo el mundo.
Desde este rincón del planeta, partieron en el siglo XIX y principios del XX, gran cantidad de asturianos que buscaban un futuro más promisorio para sus vidas.
En la actualidad existen más de cien centros en todo el mundo que nuclean a los integrantes de esta colectividad. Y es precisamente a través de la música, la danza, los platos típicos y el idioma, que se mantiene viva a Asturias en la diáspora.
Sin embargo, como explica De la Puente, con el paso del tiempo y debido a que ya no existe una corriente migratoria tan intensa, son cada vez menos los asturianos relacionados con estos centros.
"Es entonces que los centros se transforman en embajadas de la región en distintos lugares del mundo", explicó.

Una patria globalizada
Una anécdota que refleja precisamente este intercambio cultural entre Asturias y los países que han recibido a sus hombres y mujeres, es la historia del origen del himno asturiano.
Precisamente fue Fernando de la Puente, quien realizó una profunda investigación sobre el tema y pudo descubrir el vínculo de la canción, nacida en Cuba y una melodia tradicional polaca.
El especialista presentó su investigación durante el Congreso de asturianía que se realizó en Gijón el año pasado.
De la Puente, que es profesor de la Escuela de Música Tradicional de Oviendo, pudo establecer con precisión los orígenes, hasta entonces inciertos, del himno "Asturias, Patria Querida", que fue escrita por el cubano Ignacio Rodríguez Martínez, un músico que se hizo conocido con el seudónimo de Ignacio Piñeiro, en 1926.
Piñeiro era hijo de un emigrante asturiano de Grado y se inspiró en los relatos de su padre para escribir la letra de la canción que se hizo popular en La Habana, en las cervecerías La Tropical y La Polar.
De la Puente trabajó durante el himno de Asturias durante ocho meses. Realizó viajes a La Habana y a Polonia, donde pudo constatar que la música surgió de una melodía polaca tradicional.
La llevaron a Asturias emigrantes polacos que llegaron a trabajar a las cuencas mineras asturianas.
El descubrimiento del etnógrafo fue muy difundido por la prensa española y el diario La Nueva España le dedicó cinco páginas.
De la Puente aprovechó su visita a nuestra ciudad para ofrecer una charla sobre este tema y también dar intensas clases de música tradicional a las integrantes del cuerpo de baile.
Si bien la mayoría de las chicas del grupo no son asturianas, pueden aportar universalidad a las danzas de esta región española, que parece siempre dispuesta a recibir aires frescos para sus tradiciones.

Deja tu comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente