Inventora de mundos lejanos

“En un principio fueron los Antiguos, los Padres Ancestrales. Y ellos crearon al Pueblo a su imagen y semejanza para que los sirviera y honrara. Y enseñaron a sus criaturas todas las artes del mundo, para que pudieran vivir confortablemente. Les enseñaron a cultivar los alimentos. Les enseñaron a cazar cayendo desde lo alto sobre la presa desprevenida. Les enseñaron a criar a los animales de pelo y de carne. Les enseñaron a manipular el metal que les suministraban. Y el Pueblo vio que todo eso era bueno y honró a sus Creadores”.
Así comienza “La gente del cielo”, la primera novela de Verónica Figueirido, una escritora de Ciencia Ficción que reside hace más de 15 años en nuestra ciudad con su familia.
El libro fue publicado recientemente en España por la editorial Espiral. “Es el primero de una colección de 40 libros escrito por una mujer y también por un autor argentino”, señaló Verónica.
La escritora vive en la calle 60. Lo primero que llama la atención al ingresar en la casa de Figueirido es que el living es una biblioteca. Pero ella se encarga de explicar inmediatamente que en todas las habitaciones hay libros. El marido de Verónica es Juan Carlos Verrechia, un profesor de matemática amante de la Ciencia Ficción y coleccionista de libros de este género.
Allí mismo, en el living, hay un escritorio donde todos los días, después de almorzar, Figueirido se sienta a inventar nuevos mundos y civilizaciones.

Mundos lejanos
“La gente del cielo” surgió como un cuento. Fue presentado a un concurso organizado por la misma editorial Espiral y preseleccionado. Aunque no ganó el primer premio, a la gente de la editorial le gustó la idea y le propuso a Figueirido convertirlo en una novela.
Ella, que desde hace años se sienta todos los días a escribir, se tomó muy en serio la propuesta y concluyó la novela, que relata la historia de un grupo de astronautas humanos que quedan varados en un planeta lejano, donde deben aprender a convivir con una especie de hombres pájaros.
La historia que narra “La gente del cielo” no transcurre en unos días o años, sino que se extiende varios milenios. De allí que el prólogo, con ciertas reminiscencias bíblicas, habla de un génesis, del principio de una convivencia entre seres de diferentes especies.
Para narrar esta historia, la autora utiliza muchos de sus conocimientos de antropología, carrera que abandonó hace años para dedicarse a su familia. Sin dudas, su vocación era la literatura. Precisamente fue a partir de su amor por los libros que conoció a su esposo.
Verónica comenzó escribiendo cuentos fantásticos, pero de a poco se fue volcando a la Ciencia Ficción. Hace unos años, a través de las páginas de la revista El Péndulo, Sergio Gaut vel Hartman, un aficionado al género, convocó a escritores y fanáticos de este tipo de literatura a formar un grupo. Allí fue donde Figueirido vio por primera vez a Juan Carlos Verrechia.
Tiempo después la pareja se vino a vivir a Necochea y en la biblioteca de Juan Carlos ella fue encontrando a los autores que de a poco marcaron su propio camino literario. Ursula K. Leguin, Brian Stableford y Samuel Delany, son algunos de los autores de referencia, aunque para una persona como Verónica, que ha sentido pasión por la lectura toda su vida, es difícil poder reconocer quien influyó más en su estilo.
Figueirido ha publicado sus cuentos en varias revistas especializadas de la Argentina, como los fanzines Axxón, Nuevomundo, Sinergia, Cuasar, Vórtice y Galileo, y también en España, en Solaris. Por otra parte, algunos de sus cuentos han sido traducidos al inglés, el ruso y el italiano.
“A mi me gusta mucho el mar y siempre el agua está presente en mis cuentos”, señala la escritora, que también ambienta muchas de sus ficciones en nuestra ciudad, aunque no mencione explícitamente a Necochea. Sin embargo, lo que más le gusta es inventar nuevos mundos y especies e imaginar cómo sería la vida humana en esos lugares.