Aunque Firefox sigue siendo el navegador con más adeptos entre bloggers y webmasters, lo que le da mejor prensa que cualquiera de sus adversarios, en lo personal prefiero Google Chrome. ¿Por qué? Porque considero que en la actualidad es el navegador más seguro de todos, además de ser mucho más rápido que cualquier otro, incluso que el tuneado Opera 10.
Días atrás una de las páginas que visito habitualmente tenía un malware incrustado en una publicidad. Ningún antivirus lo detectó, tampoco Internet Explorer ni Firefox, sólo Google Chrome, que me advirtió sobre lo peligroso de ingresar a la mencionada página. Incluso me ofreció detalles del frame en el que se encontraba incrustado el virus.
Con esa información pude alertar al webmaster de la página, que a su vez avisó al diseñador del aviso publicitario realizado en flash.
Si bien siempre se ha elogiado la velocidad de Google Chrome, creo que lo mejor de este navegador es el sistema multitareas que permite que cada ventana que abrimos en el navegador funcione aislada de las otras e incluso del sistema operativo. Esto evita cualquier tipo de ataque.
Además, una de las innovaciones del navegador de Google es la precarga de los DNS de las páginas enlazadas por el sitio que visitamos. Aparentemente el navegador coteja los DNS precargados con una base de datos y puede determinar si cierto sitio ha registrado infecciones en los últimos meses.
De esta manera, si el usuario intenta ingresar a través de esos enlaces precargados a un sitio con infección, aparecerá una ventana en la que se nos advierte que esa página puede contener elementos peligroso para nuestro equipo.
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