Erika y Amariyona Hall

Si pensamos que nuestro país ha tocado fondo en cuestión de seguridad y violencia irracional (conclusión a la que se puede llegar tranquilamente mirando canales de noticias toda una tarde), hacer una recorrida por los medios internacionales nos permitiría ver que en realidad no somos los únicos afectados por la creciente ola de intolerancia y locura digna de una película apocalíptica.
Según informa hoy el New York Post, el viernes pasado dos adolescentes de 12 y 14 años masacraron a su madre en represalia porque les había quitado los teléfonos como castigo por querer atropellarla con el auto.



De acuerdo a la información, una joven de 14 años y su hermana de 12 años fueron arrestadas por apuñalar y matar de un tiro a su madre, que las había castigado por intentar atropellarla con el auto de la familia
La adolescente Amariyona Hall y su hermana menor fueron detenidas el viernes por la noche después de que agentes del condado de Pike concurrieron a un trailer en el que vive la familia, en Magnolia. Allí encontraron a Erica Hall, de 32 años, apuñalada varias veces y con un tiro en el pecho.
Los trabajadores de emergencia trataron de resucitar a Hall, cuyos familiares la encontraron ensangrentada fuera de su casa unos minutos antes, pero no pudo ser salvada. Luego, los investigadores se concentraron en las hijas de Hall.
Días antes las chicas intentaron atropellar a Hall con el auto de la familia. Eso llevó a la mujer a quitarles los teléfonos celulares a sus hijas como castigo. Ese habrá sido el motivo por el que las adolescentes la atacaron a puñaladas y finalmente le dispararon con un arma de fuego.

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