Un experto de la ONU en derechos humanos pidió a los gobiernos y a las grandes empresas de redes sociales que refuercen y revisen sus políticas para combatir el discurso odio en sus plataformas que con su velocidad y alcance pueden dispersarlo y provocar grandes daños en la vida real.
Desafortunadamente, los Estados y las compañías no están logrando evitar que el discurso de odio se convierta en la “próxima noticia falsa”, un término ambiguo y politizado sujeto a abuso gubernamental y discreción de las empresas, dijo el relator especial de la ONU para la libertad de expresión.
En un informe histórico que pide el refuerzo de las normas legales para combatir el odio en línea, David Kay hace un llamado a los Gobiernos y las empresas a alinear sus políticas con el derecho internacional.
"El odio en línea no es menos dañino porque está en línea. Por el contrario, este tipo de odio, con la velocidad y el alcance de su difusión, puede provocar graves daños en la vida real y casi siempre tiene como objetivo silenciar a los demás. La pregunta no es si abordar ese abuso, es cómo hacerlo de una manera que respete los derechos de todos”, asegura relator añadiendo que la mayoría de las veces las personas marginadas son los objetivos principales de este flagelo.
En su informe, Kaye expresa especial preocupación por los gobiernos que usan el discurso de odio para restringir la expresión legítima bajo el disfraz de "blasfemia" o que no definen ni hacen cumplir las reglas del discurso de odio de acuerdo con los rigurosos estándares de legalidad, necesidad, proporcionalidad y legitimidad de las leyes de derechos humanos.
--
Fuente: Naciones Unides
Publicar un comentario