El grupo terrorista se adjudicó inmediatamente el atentado y hay quienes aseguran que el tirador ingresó a la disco Pulse al grito de 'Alá es grande' y comenzó a disparar con un fusil de asalto y una pistola.
Inmediatamente se vinculó al tirador con el Estado Islámico. Él mismo habría llamado al 911 y alegado que se trataba de un ataque terrorista de ese grupo.
Sin embargo, hay algo que por estas horas no muchos comentan y es el hecho de que este sujeto había sido investigado por el FBI por posibles relaciones con grupos terroristas y no obstante ello, fue tranquilamente a una tienda de armas y se compró un rifle de asalto y una pistola.
Más allá de la supuesta homofobia del atacante y su adhesión al grupo EI, habría que preguntarse si los propios estadounidenses no son responsables de la enorme cantidad de muertos en tiroteos registrados en el país al permitir que continúe la venta libre de armas.
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