En nuestro país, como en casi todo el mundo, existe un enorme déficit del sistema educativo tradicional respecto a la formación de personas para una industria que ha crecido hasta estar presente prácticamente en toda actividad humana.
La programación está ligada hoy no sólo a computadoras, teléfonos móviles y televisores inteligentes. Con el desarrollo de la Internet de las Cosas cada vez más aparatos requieren del desarrollo de programas: heladeras, lavarropas, relojes, etc.
La robótica, la industria automotriz y la tecnología agropecuaria también requieren de cada vez más programadores.
El Plan 111mil está dirigido particularmente a jóvenes que están terminando sus estudios secundarios, aunque no hay límite de edad para asistir a los cursos.
El problema es que los cursos son presenciales y que se debe conseguir una vacante para poder inscribirse (ahora para 2018). Además, los cursos están orientados exclusivamente al lenguaje de programación JAVA.
En el siguiente post veremos una opción gratuita para acceder al mundo de la programación, con el respaldo de una de las principales empresas del mundo de la informática: Microsoft.
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